Esclavos S.XXI
Monotipos con plantilla y spray
ImpaktesVisuals Gallery (Sabadell) / NeurotitanGallery (Berlín)
Diciembre2018 / Mayo 2019

Nunca un aparato tecnológico había logrado una relación tan íntima con las personas como lo ha hecho el móvil, nunca un aparato tecnológico había resultado tan perversamente controlador y nunca tantos individuos habían renunciado voluntariamente y con agrado a su libertad. Lo queramos o no, es con él y a través de él que nos comunicamos, nos relacionamos, trabajamos, disfrutamos y vivimos. Es una adicción que ha tomado dimensiones de pandemia pero de la cual nadie se quiere librar.

ENTONCES YA ES DEMASIADO TARDE
Cuando ya no es una opción, cuando ya no es un capricho, cuando ya no es más que un apéndice, cuando encuentres a faltar el silencio, cuando la soledad es tan solo un recuerdo, cuando la cobertura ha acontecido una desazón, cuando las ondas de entrelazan y encarcelan.
Cuando descubres un monstruo malicioso y perverso, un Gòlum al que te has librado sin reflexión, un autómata al que has otorgado todos los poderes sobre tu intimidad. Entonces ya es demasiado tarde.
Y así consientes, vàcuamente, frívola, que te domine y que a través de él te controlen y adivinen, perpetuamente pendiente de él y a sus órdenes: conéctame, cárgame y descárgame, ábreme, actualízame, bájame, contáctame, añádeme y, sobre todo, no apártes nunca los ojos de la pantalla, bajo ninguna circunstancia no desvíes la mirada.
Miras el mundo a través de las imágenes, escuchas los otros a través del audio y mimas aquellos aprecios con los chatones de tus dedos. Y cuando ya no puedes más, cuando tus ojos parpadean y se te enrampen los pulgares, entonces, te compadeces, lo maldices, lo apagas y lo lanzas lejos. Pero eres consciente que no tardarás en buscarlo, que lo envolverás con las manos, que frotarás suavemente la pantalla contra tu manga y que sin más demora lo volverás a conectar, porque sabes que ahora ya es demasiado tarde.

Fotos: Natalia Carné


Neurotitan Gallery (Berlín 2019)